Mediante este espacio mostraremos obras de arquitectura latinoamericanas que tienen, a nuestro parecer, ACTITUDES para con la ciudad y su entorno social y cultural que son dignos de ser destacadas, ya sea por su mirada Regionalista/contextualista, por un rescate de las tradiciones locales o por su voluntad de "hacer ciudad" mediante espacios públicos para la comunidad.

"Hacer arquitectura en Latinoamerica es un acto político ademas de estético y cultural,toda acción que transforme los espacios en función del bienestar, participación y la apropiación de la ciudad son necesarios, y es ahí donde la arquitectura no debe estar ausente."Rogelio Salmona

martes, 26 de julio de 2011

Una "curva" en el paisaje del cerro

Obra- Casa Garcia Bernasconi
Autor- Arq. Eduardo Sacriste
Año- 1964-1968
Ubicación- Cerro San Javier,Tucumán, Argentina
Superficie cubierta-120 M2


La obra de Sacriste propone una equilibrada síntesis entre el funcionalismo y una voluntad formal que incorpora, desde el inicio, aquellos elementos que hacen que la arquitectura obtenga identificación respecto de la región en la que se implanta: el respeto por la realidad geográfica y por las tradiciones espaciales y constructivas del Noroeste, sumado a la justa valoración de la historia, de los mandatos climáticos del lugar y de la memoria de la arquitectura popular. Se trata, en síntesis, de una arquitectura que ha respondido históricamente a la cultura y a la idiosincrasia de la zona en que construye, sin renunciar nunca, por ello, a la más acabada modernidad en su propuesta, claro que en este caso se trata de una modernidad propia, ya no ajena.




La casa García/Bernasconi situada en un medio semirural sobre el cerro San Javier, cumple acabadamente con sus imperativos funcionales, pero lo que la distingue es su intencionalidad manifiesta de arraigo regional, la aplicación que en ella se vislumbra de la sabia máxima de Spengler, de cuyo pensamiento Sacriste se consideraba tributario: “La vivienda es un vegetal que crece en el paisaje materno”.



De hecho el arquitecto sostiene que la forma curva de la casa fue determinada por las cotas del terreno, como una sugerencia del paisaje, además de adecuarse mejor al entorno debido a la topografía curva y ondulada de la zona. El diseño, a su vez, parte de un segmento de círculo buscando de esta manera las mejores vistas del paisaje y las mejores orientaciones.


Recurriendo a los materiales del lugar, como piedra en los muros exteriores, techos aislados con tierra y césped y la galería integrada a la vivienda se logra una estética que rescata el espíritu del lugar y a su vez su reinterpretación moderna asegura, la continuidad de rasgos culturales reconocibles y la renovación de los mismos a la luz de la estética racionalista, resaltando el espíritu de su tiempo.





Sacriste decía que “los nidos de los pájaros además de ser formalmente perfectos, son estándar, están siempre bien orientados, construidos con una técnica clara y definida, cumplen correctamente su función, creo que deberíamos volver a las fuentes” y asimismo sostenía que una vivienda “no debe ser pensada como obra de arte, sino como el lugar que dé las posibilidades de que en ella se realice un hogar, para que responda cálidamente a un determinado modo de vivir, de trabajar, de amar, de soñar y de educar” y nosotros pensamos que en este ejemplo estas dos máximas pensadas por el arquitecto se cumplen a rajatabla, es un volver a las fuentes y a su vez logra una vivienda-hogar con todo lo que eso significa.

miércoles, 20 de julio de 2011

Cucurrucucú Paloma - Caetano Veloso

"Seamos realistas y hagamos lo imposible." - Ernesto "Che" Guevara


CUCURRUCUCU PALOMA

Dicen que por las noches
no más se le iba en puro llorar;
dicen que no comía,
no más se le iba en puro tomar.
Juran que el mismo cielo
se estremecía al oír su llanto,
cómo sufrió por ella,
y hasta en su muerte la fue llamando:

Ay, ay, ay, ay, ay cantaba,
ay, ay, ay, ay, ay gemía,
Ay, ay, ay, ay, ay cantaba,
de pasión mortal moría.

Que una paloma triste
muy de mañana le va a cantar
a la casita sola
con sus puertitas de par en par;
juran que esa paloma
no es otra cosa más que su alma,
que todavía espera
a que regrese la desdichada.

Cucurrucucú paloma, cucurrucucú no llores.
Las piedras jamás, paloma,
¿qué van a saber de amores?
Cucurrucucú, cucurrucucú,
cucurrucucú, cucurrucucú,
cucurrucucú, paloma, ya no le llores 

jueves, 7 de julio de 2011

Concurso Lomas de Tafí


Nombre: 196 Viviendas agrupadas en el emprendimiento Lomas del Tafí, 1er. Premio en el Concurso Nacional de Ideas y Anteproyectos.

Ubicación: Tafi Viejo,Tucumán, Argentina 

Autores: Arq. Adrián Osvaldo Olivero - Arq. Angel Ezequiel Muñoz

Colaborador: Arq. Cesar Ignacio Zaffalón

Año: 2009


Superficie cubierta a construir.11.500 m2




En el año 2009 mediante un convenio firmado entre el Instituto Provincial de Vivienda y Desarrollo Urbano y el Colegio de Arquitectos de Tucumán se organizó un concurso nacional de ideas y anteproyectos para diseñar 196 viviendas agrupadas en el mega emprendimiento urbanístico Lomas de Tafí ubicado en el departamento Tafí Viejo de la provincia de Tucumán, siendo esta tal vez la manera mas obvia y eficaz de no caer en la monotonía y repetición de las viviendas sociales y permitiendo ver propuestas de arquitectos de todo el país con diversas maneras de abordar el tema.


Imagen mega emprendimiento urbanisitico Lomas de Tafí

Uno de los objetivos fundamentales de la organización del concurso fue obtener un proyecto de vivienda social con calidad, espacialidad, aplicación de nuevas tecnologías y habitabilidad, teniendo en cuenta además el espacio para el desarrollo y desenvolvimiento correcto de personas con capacidades diferentes.



El concurso, al que se presentaron 44 propuestas de todo el país, pedía dos tipologías, una en planta baja y otra tipo dúplex, más una vivienda para usuarios con discapacidad motriz; en conjuntos que tuvieran espacios de uso común. Los módulos debían agruparse en cuatro manzanas, dispuestas a lo largo de bulevares, pensados para recuperar la identidad de arterias verdes arboladas que antiguamente identificaron a la ciudad de Tafí viejo. También se estipuló el crecimiento: un núcleo inicial de dos dormitorios en primera etapa, de 55 m2 en planta baja y 60 m2 en dúplex. La expansión, en la segunda etapa, se estableció con un 3° dormitorio, galería y cochera.



Los arquitectos Ángel Muñoz y Adrián Olivero de la Universidad de Mar del Plata obtuvieron el primer premio. Su idea esta basada en un tipo de manzana que responda de forma adecuada y diferenciada a cada frente urbano, y a su vez resuelva las diferentes instancias de privacidad necesarias a la hora de conformar el conjunto de viviendas.

Lamina primer premio

Partiendo de esta premisa las manzanas cuentan con dos frentes bien diferenciados y reconocibles, uno hacia el barrio y otro hacia el boulevard. En ambos se tuvo en cuenta la gradación espacial y se diseño el paso desde lo netamente publico, la calle, hasta llegar al de mayor intimidad, la casa, generando diferentes etapas de privacidad.


Lamina primer premio


Para el primero diseñaron un sistema de patios donde desembocan los accesos de las viviendas en planta baja. Los seis propietarios del condominio se apropian del espacio semipúblico, siendo este es un lugar doméstico que les proporcionará a sus propietarios identidad dentro del complejo. Cada patio es denominado con un nombre que es otorgado por la especie que en él se planta, por ejemplo Patio de los Lapachos rosados.


                          

Hacia el boulevard, ubicaron los dúplex y retiraron la línea municipal 9 metros del cordón, para conseguir distintas instancias de privacidad, y diseñaron "una pieza urbana" de dos niveles conformada por las viviendas en dúplex que enfatiza el carácter del mismo. El crecimiento de la vivienda en dúplex permite que el 3° dormitorio, en planta baja, se utilice como taller o comercio, aprovechando su ubicación y el fluido carácter circulatorio del boulevard.



Los estacionamientos se ubican en pequeños sectores agrupados y cercanos al trazado de las calles para lograr una adecuada economía a la hora de materializarlos, y a su vez, próximos a los accesos a las viviendas. Sobre el boulevard estos se disponen de forma tal que no interrumpen el recorrido lineal de la vereda, priorizando el carácter peatonal del recorrido.


Lamina primer premio


Considerando el duro clima tucumano el diseño de las viviendas asegura un correcto asoleamiento y ventilación  Cuenta con voladizos y aleros que permiten el ingreso del sol en invierno y lo restringen en verano, de la misma manera, la ventilación de los ambientes se desarrolla en forma cruzada y también en sentido vertical para permitir un correcto flujo de aire y así mantener frescos los ambientes en el verano.

 


Con el fin de obtener una sencilla construcción de las mismas, el sistema constructivo elegido es tradicional, compuesto por ladrillos cerámicos, cimientos y encadenados de hormigón armado, y cubierta de chapa ondulada.


Los miembros del jurado consideraron que el conjunto "hace ciudad" y valoraron especialmente "la contundencia de su imagen urbana frente a la dispersión del contexto inmediato, apoyada en volúmenes puros, netos, compactos, simples, de viviendas de dos alturas sobre el boulevard principal y casas de planta baja sobre la calle posterior, agrupadas en torno a espacios semipúblicos de seis viviendas, lo que permite un uso controlable por los propios usuarios." Sin embargo, criticaron "el sobredimensionamiento de las veredas sobre el boulevard" y apuntaron que "no todas las tipologías de viviendas tienen igual ajuste de diseño".

El segundo premio fue para el equipo integrado por Adriana Correa Berbel, Carlos Cicero, Ricardo Zapata, Fernanda Canseco, Alicia Espinosa y Ángel López, de Jujuy. 

Los arquitectos buscaron lograr la mayor cantidad de lotes con orientación Norte-Sur, con un alto porcentaje de espacios verdes semipúblicos en concordancia con los espacios privados de cada vivienda. Tomaron en cuenta la ondulación del terreno e integraron los espacios semipúblicos al cañadón. En cuanto a las viviendas, las ubicaron en el centro del lote y optaron por volúmenes puros, líneas rectas y techos planos.


Lámina segundo premio
Lámina segundo premio


El jurado valoró fundamentalmente "el espacio semipúblico tanto en la escala íntima de las viviendas que lo rodean como la relación del mismo con el espacio urbano" y consideró que "el espacio mantiene una escala apropiada de hasta siete viviendas de buena arquitectura, fácil apropiación, control y mantenimiento". También elogió el ritmo entre elementos construidos y elementos verdes, y la disposición lineal de los bloques, en sentido Este-Oeste, que permite ventilaciones cruzadas en todos los ambientes de las viviendas con orientación Norte-Sur.

El jurado otorgó además tres menciones honoríficas, al cordobés Germán Margherit, y a los equipos conformados por Clorindo Testa, Juan Fontana, Oscar Lorenti y Florencia Wagner; y Hugo Ahumada y Ernesto Lisiak, de Tucumán. 

Margherit resolvió el programa con dos formas de organización del tejido: una célula de 6 lotes y otra de 10 lotes. Ubicó las tipologías dúplex en los bordes de las células acompañando y dando escala a los corredores viales. Las casas para discapacitados motrices quedaron en las esquinas de las manzanas 1 y 3, para mayor accesibilidad. En los vacíos resultantes de las células proyectó el patio comunitario, pensado como "genérico", con un equipamiento mínimo, posible de ser consolidado y personalizado. 

Lámina mención 1
Lámina mención 1

Testa y su equipo propusieron viviendas que guardan ciertas reminiscencias con los prototipos presentados en el concurso del Banco Hipotecario (1° premio región NEA, 2007) y en el concurso Vivienda Social ARQ (3° premio, 2009): módulos con bóvedas de cañón corrido de chapa como cubiertas, pérgolas, terrazas y espacios públicos y semipúblicos. Hay distintas variantes de agrupamiento para generar diversidad y el crecimiento está diseñado para que el módulo original se vaya enriqueciendo con el tiempo.



Lámina mención 2
Lámina mención 2

Ahumada y Lisiak, por su parte, concursaron con una vivienda con imagen neutra, que posibilita el crecimiento con planta alta o planta baja, con una cubierta bioclimática compuesta por una losa más un sobre techo. Las unidades se aparean eficazmente al duplicar la superficie de los patios interiores para ventilación. Conformaron las manzanas con tanques colectivos de agua, buzón, depósito de residuos, estacionamientos y paradas de colectivos. Para dar privacidad a los accesos, se valieron de muros verdes. 


Lámina mención 3

Lámina mención 3

En su dictamen, el jurado destacó la calidad y factibilidad de los proyectos y recomendó al Instituto Provincial de la Vivienda que transforme en vinculante la relación, en primera instancia con el primer premio y en segunda instancia con los demás, para poder desarrollar alternativas experimentales. 

viernes, 1 de julio de 2011

día+arquitecto+latinoamérica

Torres de Ciudad Satélite - Ciudad de Mexico - Luis Barragán



Hacer arquitectura no puede reducirse
a un problema funcional y eficiente.
Es y debe ser, sobre todo, un
hecho cultural, colectivo e histórico:
un acontecimiento para el paisaje y
para los sentidos. Hacer arquitectura
es un acto de rememoración, es recrear.
Es continuar en el tiempo lo
que otros han a su vez recreado. Por
eso constituye un acto profundamente
culto, pues no se recrea lo que no
se conoce. Por el contrario, es el conocimiento
el que permite el escogimiento
y la selección. Y éste es el
gran momento de la creación arquitectónica.
El momento en el cual, como
sucede con la música, se empieza
a componer, a transformar lo existente,
a elaborar la forma, a definir la espacialidad
particular de cada obra y a
establecer la espiritualidad de la arquitectura.



Rogelio Salmona